La última sesión de prácticas libres pre temporada del Campeonato Mundial de Resistencia (FIA WEC) ha cobrado su primera víctima material.
El Porsche 911 RSR #56 del Team Project 1, al comando del piloto Brendon Iribe el cual salió ileso, sufrió daños que van más allá de poder ser reparados por el equipo en Sebring. El percance en pista vino tras un contacto con uno de los prototipos híbridos de Toyota Gazoo Racing.
La máquina hizo contacto fuertemente tanto en la parte frontal como la delantera con una de las barreras de concreto.
El equipo se encuentra en contacto con los demás equipos en busca de un chasis de reemplazo.
La maquina alemana, también conducida por Olliver Millroy y Ben Barnicoat, tendría que estar lista para cuando la serie tenga su primera práctica oficial el proximo Miércoles.